En esta enfermedad la circulación de la sangre en las arterias del corazón está seriamente afectada. La luz del o de los vasos esta disminuida en un 75% o más. Cuando el paciente hace ejercicio una porción del musculo cardiaco no recibe oxígeno y esto se manifiesta clínicamente por dolor o un peso en el pecho o una opresión que mejoran con el reposo. Cuando la luz se bloquea completamente, la porción de musculo que depende de ese vaso se necrosa irreversiblemente y si en 6 horas no se destapa y no se normaliza su luz aparece el infarto de miocardio
A pesar del desarrollo en los últimos años del manejo del infarto: la atención primaria de las ambulancias mientras se traslada el paciente a un servicios de urgencias, de las drogas que se tienen disponibles para lisar el coagulo que está bloqueando la circulación, de las medidas mecánicas que abren el vaso como el cateterismo cardiaco pronto, la angioplastia (dilatación de la luz del vaso bloqueado o del parcialmente obstruido) y de mallas que mantienen la abierta la luz del vaso (stent), de las unidades de cuidados intensivos y unidades coronarias la mortalidad en las primeras horas permanece cercana al 40% y es la principal causa de muerte en hombres mayores de 35 años y en la población general mayor de 45 años. Entre las complicaciones más frecuentes del infarto están la falla cardiaca, las arritmias, insuficiencias valvulares y muerte súbita.
A los pacientes que tienen enfermedad coronaria se han encontrado varias patologías que les son comunes y que producen arterioesclerosis, se ha llamado factores de riesgo para sufrir enfermedad coronaria y son : Hipertensión arterial mal controlada, cigarrillo, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, obesidad, consumo excesivo de licor, antecedentes familiares, sedentarismo, sexo masculino y edad.
El control de uno o de varios de estos factores de riesgo previene la aparición de enfermedad coronaria y sus complicaciones.